Todos los alimentos que consumimos diariamente pueden clasificarse en tres tipos: alimentos perecederos, no perecederos y semi-perecederos. Y es fundamental que todo el mundo conozca esta información para evitar enfermedades derivadas de la mala manipulación y almacenaje de los alimentos.
Así que en este artículo aprenderás fácilmente todo lo que necesitas saber sobre la clasificación de los alimentos y cómo debes almacenarlos para mantenerlos en perfectas condiciones.
Tabla de Contenidos
¿Qué son los alimentos perecederos y cuáles son?
Los alimentos perecederos son productos que deben consumirse poco después de su compra, incluso si se refrigeran, debido a su descomposición bajo factores ambientales como temperatura y humedad. Algunos ejemplos son las verduras, frutas y carnes frescas.
Con el paso de los días, las proteínas y vitaminas que contienen los alimentos se comienzan a perder, cuando factores como la luz, humedad, temperatura y sequedad hacen su efecto negativo.
Esto se debe a que los alimentos perecederos son atacados por microorganismos como hongos y bacterias, que como tú y como yo, quieren alimentarse de los nutrientes que contienen productos como la carne, leche, queso, frutas, pescados y verduras que no tienen conservantes.
Tipos de productos perecederos y ejemplos
A continuación, veremos cuáles son los principales productos perecederos y algunos ejemplos de cada uno de ellos:
- Carnes: Pollo, carne roja y todo tipo de carnes sean frescas o congeladas.
- Frutas: Manzanas, peras, fresas y todas las demás. Pueden ser frescas, congeladas, procesadas o deshidratadas.
- Lácteos: Se podrían considerar como los más delicados, entre estos se encuentran; leche líquida, mantequilla y quesos frescos.
- Vegetales y verduras: Frescos, deshidratados o procesados.
- Pescados y mariscos: Otros de los productos perecederos más complejos, ya que necesariamente deben mantenerse a bajas temperaturas. Pueden estar vivos, frescos o deshidratados.
- Alimentos procesados: Frescos, congelados o deshidratados.
- Jugos o zumos: Dependiendo del tipo de fruta también variará su grado de descomposición.
Por otro lado, los alimentos que ya han sido cocinados también se consideran alimentos perecederos, aunque su deterioro es más lento que el de los alimentos crudos.
Por eso, para conservarlos frescos durante más tiempo, se recomienda mantenerlos refrigerados, congelarlos o envasarlos al vacío.
¿Cuáles son los alimentos no perecederos?
Los alimentos no perecederos son aquellos alimentos que tienen una larga vida útil y que solo comienzan a descomponerse cuando son abiertos o por una mala manipulación o almacenamiento.
Generalmente los alimentos no perecederos son aquellos que se encuentran en latas, en plástico o en cartón.
Debido a que estos empaques ayudan a mantener mucho mejor su durabilidad.
Estas características hacen que los alimentos no perecederos sean los más utilizados para donar a los bancos de alimentos.
Tipos de alimentos no perecederos y ejemplos
Los principales tipos de alimentos no perecederos son los siguientes:
- Atún enlatado: Es uno de los más populares en todo el mundo, con una duración hasta de 3 años.
- Verduras enlatadas: Una de las ventajas es que al estar enlatados, estos cortes de verduras mantienen durante mucho más tiempo sus propiedades nutritivas.
- Pastas y sopas enlatadas: Tienen una vida útil hasta de 18 meses.
- Azúcar, café, arroz, sal o legumbres en bolsa: Su vida útil es bastante larga siempre y cuando se mantengan correctamente almacenados.
- Ingredientes básicos: Cómo la harina de trigo, jarabe de maíz, maicena y la harina de maíz. Estos comienzan su deterioro al ser abiertos, pero además, hay que mantenerlos fuera del alcance de la humedad para que tengan una vida útil más larga.
- Productos herméticos o envasados: Cómo mermeladas, jarabes, mieles, vinagre, aceitunas y conservas. Su durabilidad es bastante considerable, ya que pueden durar años si son bien almacenados, solamente hay que estar al tanto de que no cambien de color u aspecto.
¿Cuánto tiempo duran los alimentos no perecederos?
A diferencia de los alimentos perecederos, los alimentos no perecederos no se ven afectados por la humedad, temperatura o presión, porque han pasado por proceso de elaboración y fabricación que les permiten estas características.
Sin embargo, cada uno de los productos vienen con su propia información de “fecha de caducidad, fecha de vencimiento o consumir preferiblemente antes…”.
Aunque todo dependerá del proceso de tratado que se le ofreció al producto en su fase de trazabilidad alimentaria, es decir, durante su etapa de fabricación y posterior almacenamiento.
¿Cómo se debe almacenar un alimento no perecedero?
La principal recomendación para la conservación de los alimentos no perecederos es guardarlos en un lugar fresco, seco, bien ventilado y sin luz solar.
Al estar en un lugar fresco y seco, hace que los microorganismos que puedan perjudicar al producto no puedan desarrollarse, además de que se disminuye la aparición de insectos.
No obstante, en casos en los que el embalaje no sea práctico, se puede cambiar el alimento a recipientes herméticos para que no entren los insectos.
Otra de las recomendaciones de almacenaje es conservarlos a temperaturas entre 15 °C a 18 °C para evitar la reproducción de insectos, bacterias u hongos.
También se debe evitar la luz solar, ya que esta promueve la oxidación y hace que los alimentos pierdan sus componentes originales y su valor nutricional.
En definitiva, un almacenamiento limpio limita la contaminación, y la buena ventilación mantiene las bajas temperaturas, elimina la humedad y aleja al mismo tiempo los malos olores.
¿Cuáles son los alimentos semi-perecederos?
Los alimentos semi-perecederos son los alimentos que tienen una larga durabilidad, aunque su deterioro comienza antes de lo que indica su fecha de vencimiento, además de que su descomposición se acelera al no tenerlos bien almacenados.
Siempre y cuando se mantenga bien almacenados y dependiendo de la calidad del producto.
Son alimentos que generalmente tenemos que almacenar en alacenas o lugares frescos donde no exista la humedad y no les toque el sol.
Tipos de alimentos semi-perecederos
Algunos de los alimentos semi-perecederos más comunes son:
- Granos secos y cereales: Granos como lentejas, soja y la arveja deben de revisarse antes de escogerlos en el mercado e igualmente detallar el empaque, para que no haya fallas que puedan afectar su durabilidad.
- Frutos secos: Son las nueces (maní, avellanas, almendras, pistachos y muchos más), frutos deshidratados (uvas pasas y entre otros) o semillas como las de girasol, linaza, ajonjolí, etc.
- Paquetes en general: En esta clasificación nos encontramos con las galletas, frituras, pastas, chocolate, café, confituras y todos esos productos que se envasan en bolsas, cajas o plásticos para su distribución y conservación.
En conclusión, es muy importante aplicar el correcto almacenaje a cada producto dependiendo de su clasificación como alimentos perecederos, no perecederos o semi-perecederos.
De este modo, nuestra salud y la de los demás no se verá en riesgo por las consecuencias de no poseer un buen conocimiento sobre el guardado y almacenado de los alimentos.
Food and Beverage Manager | Director de Alimentos y Bebidas en Grupo Antequera Golf
Socio Senior en AIDABE – Asociación Iberoamericana de Directores y Directoras de Alimentos y Bebidas